El otro día, uno de los mejores cómicos del país se mostraba un tanto escéptico con el futuro del stand-up ; no contemplaba su desaparición pero estaba casi seguro de que se estancaría en su evolución. No estoy de acuerdo con él, en absoluto, aunque entendí sus razones.
Como ya dije en el post anterior (La comedia en España) creo que hay una serie de nuevos valores que han irrumpido con una fuerza extraordinaria; cómicos con poca experiencia aún pero que, si no se tuerce su camino, se convertirán en los maestros del futuro. Y también hay otros que nunca conseguirán triunfar; es duro pero también cierto. Aunque nadie puede estar seguro de quiénes lo harán y quiénes no. ¿Cuántos chavales intentan, cada año, superar las pruebas de acceso para entrar (por ejemplo) en los infantiles del Real Madrid? ¿Cuántos lo consiguen? ¿Cuántos suben al primer equipo? ¿Y de esos, dónde está la mayoría?
Los americanos dicen que "si quieres oír cómo se ríe Dios sólo tienes que contarle tus planes". Es verdad. ¿Cuántos de los niños que entran en los infantiles del Madrid triunfan de verdad? ¿Cuántos fueron rechazados, conocieron el éxito en otros equipos y después fueron fichados por el club de sus amores? ¿A cuántos deportistas, cantantes, escritores, actores... algún iluminado de turno les dijo en sus comienzos que no servían para ese oficio? ¿Cuántos de esos visonarios se equivocaron? Muchos.Y por qué sabemos que se equivocaron? Porque ellos no se rindieron. Si hubieran abandonado nunca habrían podido demostrar su valía. DEBES TENER FÉ EN TUS POSIBILIDADES para poder contar tu historia.
Pero tampoco debes dar la espalda a la realidad: yo soy un desastre jugando al fútbol. y jamás me habría presentado a las pruebas. Se me da muy bien el baloncesto, me hubiera encantado dedicarme a ello profesionalmente, pero sólo mido 1'80. Sigo amando ese deporte pero soy consciente de mis limitaciones.
Hemos perdido mucho del romanticismo que el stand-up tenía en sus comienzos, y en demasiados casos se ha transformado en un funcionariado: situarme aquí me garantiza x actuaciones al año, ser amigo de este programador me supone un circuito al que no podría aspirar de otra manera, si hago este favor obtendré esto otro a cambio... En este proceso, se ha perdido mucho del buen trato a las personas. Muchos cómicos se quejan de que no hay igualdad de oportunidades, de que sufren discriminación geográfica, de criterios de selección inconsistentes o arbitrarios modificables según el caso... Tienen razón; yo también lo sufro en mis carnes, pero es lo que hay. Siempre hay compañeros dispuestos a hablar mal de ti y a ponerte zancadillas en el camino porque quiere frenar tu ascenso, porque no le gustas o simplemente porque disfrutan hablando mal de los demás. Pero no podemos rendirnos. Robert McKey explicó que la gran ventaja de un cómico era que la suerte no influía en su trabajo: si eres bueno, acabarás triunfando. Y cuando alguien te cierre una puerta no te empeñes en abrirla a toda costa; elige otro camino. Sé que cuesta entenderlo cuando comienzas, pero créeme; es la verdad. Lo único que puedes hacer es trabajar duro y no rendirte.
Y esto nos lleva a la preparación y la formación de un cómico. Antes, ese papel recaía en Paramount Comedy, la madre y protectora de todos. Yo soy uno de esos casos y siempre estaré agradecido por todo lo que me dio; como un buen hijo, cada vez que me llame acudiré a sus brazos. Pero, ahora, los tiempos han cambiado y las personas que realmente se están ocupando de formar a los nuevos talentos que surgen en España, de poner a su alcance las herramientas necesarias, son otros cómicos. A algunos sólo parece moverles el interés económico y convendría huir de sus propuestas, pero otros luchan por transimitir su visión de la comedia y el amor por este arte. El año pasado, dos de ellos me llamaron para incorporarme a su proyecto, ya consolidado, y acepté sin dudarlo: Quique Macías y Miguel Lago y su EOC (Escuela Superior de Comedia). Si estáis interesados en convertiros en cómicos, os recomiendo que visitéis el enlace.
Sé que a más de uno le sorprenderá que yo me haya unido a un proyecto dirigido por dos cómicos con los que he tenido mis diferencias en el pasado: en su momento nos sentamos a hablar, escuchamos los argumentos de los demás y solucionamos cualquier problema que hubiera podido existir. ¿Veis? Otro ejemplo de que nunca sabes qué te deparará el futuro. Si alguien me hubiera dicho hace tres años que yo formaría parte del profesorado de la EOC me hubiera reído en su cara; estaba convencido de que mi programa Solo ante el peligro se mantendría en antena, como poco, tanto como Noche sin Tregua (la crisis acabó con la producción propia de Paramount y se llevó por delante mi programa y el de David Navarro, Iñaki Urrutia y Dani Rovira, Smonka! a pico y pala) y que seguiría de gira por los escenarios de España con Paramount, y también me equivoqué en eso. Hoy, he montado mi propio espectáculo en el teatro Galileo, Solo en casa, a mi gusto, y estoy contribuyendo con mi trabajo a la formación de los futuros cómicos. Sólo puedo decir que Miguel y Quique se toman su cometido muy en serio y lo están llevando a cabo con una profesionalidad que, hasta ahora, no había visto.
Me alegro de que decidieran contar conmigo en su aventura.
¿Alguna receta de seguridad? ¿Pastillas para creer en uno mismo? ¿Consejos para poder andar hacia delante, en vez de hacia atrás?.
ResponderEliminaryo soy una persona que no se rinde con facilidad, pero me cuesta creer en lo que hago, y eso hace que me detenga, que tenga dudas... Y viendo los mountruos que se suben a darlo todo, tiendo a creer que no hay espacio para mi. Tiendo a comparar mucho, lo se, soy la mierda, pero es que siempre ha sido así, no se si en mi vida o en la de los demás también.
O a lo mejor es que soy un poco pesimista, no lo se.
Hola Juan, acabo de terminar de leer tu blog sobre el estado de la comedia en España y veo que en él no dices realmente como está. Comentas un futuro incierto y avisas de sus peligros, pero no das una valoración de ella.
ResponderEliminarYo, desde mi humilde opinión, me gustaría saber como está ya que vivo de ella. Soy un programador de comedia en locales y creo que el problema es que no se cuida.
Si uno destaca mas de la cuenta, aparecen las envidias...Si a uno le salen mejor las cosas, intentan que nunca lo sepan...Si uno lucha por la comedia, aparecen los aprovechados...en fin, no se cuida.
Pero gracias a Dios o al menos, se que no todo el mundo es malo, ni envidioso, ni mentirosos...también existe mucha gente buena en esta profesión, que hace que tú trabajo se valore y que tenga una progresión positiva.
Yo os valoro, a los cómicos, mucho. Porque se que no es fácil ser cómico. Muchos viajes, duermes fuera, cambiar el texto, nuevas ideas, sitios diferentes cada día...que te voy a contar a tí que tú no sepas. Por eso lucho cada día por intentar cuidarla de los que realmente no quieren o no saben lo que es la comedia.
Muchas veces cuando hablo de esto, hago un simil con la situación inmobiliaria que vivimos en nuestro país. La llamada BURBUJA INMOBILIARIA...pues creo que como esto siga así, ocurrirá algo parecido.
Bueno juan, te sigo desde que vi tus videos sobres los que hablan mal de ti en Marca, y me gusto el buen humor o la forma como la llevaste y como la afrontaste...DE CARA. Algo que te honra y que dice mucho de ti, porque no decirlo algo que tenemos en común tú y yo.
Suerte con la EOC, y espero que de allí salgan cómicos que luchen de verdad por la comedia.
PK
Me he sentido muy identificado con lo que has escrito (con la parte de los que están empezando).
ResponderEliminarYo acabo de llegar a Madrid después de 3 años actuando por otras partes. Y al hablar con un programador, me ha comentado la "situación", si no te conocen no te contratan, si no te contratan no te conoces. Este circulo vicioso tenía anteriormente sus "rendijas" por las que te metían en salas de confianza y te dabas a conocer.
La crisis ha reducido considerablemente las rendijas, la gente solo apuesta por lo seguro, no contrata a gente que no conoce.
Pruebo para Paramount, pero parece infinito y no grabo. No puedo poner vídeos en youtube porque no lo tengo permitido por contrato, con lo que sigo siendo desconocido.
Que puedo hacer? pues esperar a ver si ocurre algo, y estar atento para aprovecharlo cuando ocurra...
Este es un comienzo jodido y duro que me ha tocado vivir...
Por eso me alegra saber que gente como Quique o Miguel y tu, apoyáis a los que estas comenzando.
El Stand-up evolucionará, como todo, siempre y cuando, cuidemos las nuevas corrientes que poco a poco nos van llegando.
Buena entrada.
ResponderEliminarPara mí hay una cosa fundamental, y que creo que cualquiera que quiera dedicarse a esto debería tener en cuenta.
Hay diferentes maneras de hacer las cosas, distintos caminos para llegar a un punto. Pero tienes que elegir. Fundamentalmente los dividiría en dos grandes bloques:
El primero, hacer todo lo que te piden, para así encajar en los sitios, y conseguir que te den mucho trabajo. Si trabajas mucho, te irá conociendo más gente, y eso repercute a su vez en más trabajo. Esto no está mal, dadas las circunstancias.
El segundo camino es ser tú mismo, confiar en lo que haces, y tratar de ser tan jodidamente bueno que todo el mundo quiera que trabajes para él. Esto requiere una gran confianza en ti mismo, una capacidad de autocrítica muy importante, y mucha honestidad. Es difícil mantener esta posición, sobretodo cuando ves que tu momento parece no llegar nunca, y que todo está en contra tuya.
Cada uno que elija el camino que quiera. Uno es más fácil que el otro, pero el otro es muchísimo más satisfactorio (sobretodo si amas esta profesión). Eso sí, puede llegar a ser muy duro, y la tentación de "hacer lo que sea" puede ser muy fuerte.
Pero como has dicho, si eres bueno, tarde o temprano te tiene que ir bien. Así que hay que mantener el tipo, seguir luchando, y confiar en que el talento, si es que existe, prevalecerá.
Y un último apunte. Respecto a lo de ser consciente de para qué vales, y para qué no vales. Es muy difícil asumir que no vales para algo que deseas con mucha fuerza. Es un poco como esos chavales que se van de los castings de OT llorando, y gritando cosas como "¡No acabaréis con mi sueño!", justo después de oír la frase "No encajas en el perfil". Es duro, pero más duro es invertir tu vida en un fracaso seguro. Hay que saber cuándo parar, y esta es la parte más jodida. De momento yo animo a intentar poner toda la carne en el asador, y prepararse para muchas amarguras, porque no hay éxito sin sufrimiento.
Abrazos!
Esta entrada me ha gustado mucho (menos que la anterior, todo hay que decirlo). Y casi más que la entrada, si cae, me han gustado los comentarios.
ResponderEliminarSin embargo, creo que debo dejar mi punto de vista en relación con la gente que empieza: está muy bien el apoyo a los principiantes. Yo fui uno de ellos y agrada ver que te estás metiendo en un mundo en el que parece que no vas a molestar. El problema es que ese apoyo es demasiado generalizado: no puede ser que todo el mundo seamos la hostia como se nos dice, aunque tú sepas que acabas de hacer el ridículo en tu actuación, aunque veas a un compañero que, claramente, no sirve para ésto y, de todos modos, cuando baja le decimos "¡Eh, eres la hostia! ¡Sigue así!"
En mis pinitos en el mundo de la comedia, eché de menos algo más de sinceridad. No estoy acusando a nadie de falso, pero ni se puede subir a todo el mundo el mismo pedestal, si se le puede hundir en el mismo lodo. ¿De qué me sive a mí, como principiante, que mi trabajo se equipare al de cualquier gran cómico si estoy viendo que se encumbra igual al que me da cien mil vueltas y al que se ve que no da para más?
No es una acusación, sólo un apunte al respecto. Al fin y al cabo, todos somos personas, a todos nos cuesta decir cosas que minen al destinatario.
Saludos, queridos ex casi-compañeros
Fernando, no he dado el tema por concluido. Hay un post anterior, La comedia en España. Habrá un tercero y un cuarto; seguro.
ResponderEliminarGracias a todos por pasaros por aquí.